En el ámbito del derecho de extranjería en España, las figuras del arraigo social y el arraigo sociolaboral juegan un papel fundamental en la regularización de extranjeros que viven en el país. Sin embargo, con la introducción de esta última nueva figura, muchas personas se preguntan cuáles son las diferencias entre ambas. A continuación, te explicamos en qué consiste cada uno y cuáles son las principales novedades que trae consigo el arraigo sociolaboral.
¿Qué es el Arraigo Social?
El arraigo social ha sido, hasta ahora, una de las vías más utilizadas por los extranjeros en situación irregular para obtener una autorización de residencia. Este permiso, que se concede por circunstancias excepcionales, requiere una serie de condiciones, entre ellas:
- Residencia continuada en España durante al menos tres años.
- Contrato de trabajo que garantice medios de subsistencia.
- Informe de inserción social emitido por las autoridades de la comunidad autónoma, el cual evalúa la integración del solicitante en la sociedad española.
Esta figura también permite a los extranjeros regularizar su situación no solo con un contrato de trabajo, sino también mediante vínculos familiares o la demostración de medios económicos propios.
¿Qué es el Arraigo Sociolaboral?
El arraigo sociolaboral es una nueva modalidad que busca agilizar el proceso de regularización para aquellos que ya cuentan con una oferta de trabajo. Las diferencias principales con el arraigo social son:
Reducción del Tiempo de Residencia
Mientras que el arraigo social requiere tres años de permanencia en España, el arraigo sociolaboral solo exige dos años de residencia continuada. Esto representa una gran ventaja para aquellos que buscan regularizar su situación de manera más rápida.
Exclusividad del Contrato de Trabajo
A diferencia del arraigo social, que permite otras vías de regularización, el arraigo sociolaboral es exclusivo para aquellos que cuenten con un contrato de trabajo. Esto significa que no se podrá optar a esta figura mediante vínculos familiares o medios propios.
Eliminación del Informe de Inserción Social
Otra de las grandes novedades del arraigo sociolaboral es que ya no será necesario presentar un informe de inserción social. Esto simplifica considerablemente el proceso, ya que en algunas comunidades autónomas, la obtención de este documento podía llevar varios meses.
Arraigo Social o Arraigo Sociolaboral diferencias, ¿cuál te conviene?
La elección entre el arraigo social y el arraigo sociolaboral dependerá de tu situación particular. Si llevas más de tres años en España, tienes vínculos familiares o puedes demostrar medios económicos propios, el arraigo social podría ser la opción adecuada para ti. Sin embargo, si tienes una oferta de trabajo y cumples con los dos años de residencia, el arraigo sociolaboral te permitirá regularizar tu situación de forma más rápida y sencilla.
Ambas figuras tienen como objetivo facilitar la regularización de extranjeros en España, pero las diferencias clave entre el arraigo social y el arraigo sociolaboral residen en los tiempos de residencia, la exclusividad del contrato de trabajo y la eliminación del informe de inserción social. Analiza tu situación personal y consulta con un abogado especializado para elegir la opción que mejor se ajuste a tus circunstancias.
